Internet tiene mucho que ofrecerte, tanto cosas buenas como malas, y por más que las cosas buenas que pueda darte son extremadamente numerosas en comparación con las malas, no hay que olvidarse que así como eres estafado en el mundo real, también puede pasar en el mundo virtual, y en muchos casos, estos no pueden ser solo hackeos, sino trampas camufladas con demasiado cuidado y detalles para que caigas en ellas.
Uno de los casos más comunes en la web es el del “phishing”, un cyber-crimen que no solamente es perjudicial, sino que también te frustra totalmente una vez que te das cuenta de que has sido engañado para dar gustosamente tu información personal o bancaria para el bien de otra persona que solamente busca perjudicarte, porque de eso se trata primordialmente. La delincuente que comete phishing solamente busca que tú le des la información de forma gustosa, aunque ellos se basan de artimañas basadas en la ingeniería social para que lo hagas. Si quieres evitar ser víctima de este tipo de crimen cibernético, solo debes prestar atención a los sitios en los que depositas tu información personal, investigar con suma precisión sobre los sitios a los que te vas a registrar antes de hacerlo.
Otro peligro constante es que un sitio propenso al phishing se haga pasar por otro, pero cuando hacen esto puede que no lo hagan bien, así que siempre presta atención a los iconos que aparecen a la izquierda de la URL del sitio web, ya que muchas veces no pueden ser copiados. Recuerda que prestando un poco de atención puedes evitar los casos de phishing y evitar tener que contactar a los bancos en los que te registraste para cambiar todas las tarjetas de crédito.